Por ¿Hay orden en tu árbol genealógico? por Florencia Pérez Pandolfo
Alguna vez te pusiste a pensar o analizar ¿cómo fueron los vínculos entre tu padres, abuelos y bis abuelos? ¿Cómo fueron sus personalidades? ¿Qué tan transparentes fueron entre sí?
¿Quedaron secretos ocultos? ¿Deudas? ¿Hubieron personajes expulsados del sistema familiar?
Todo esto revela información importante sobre el origen de nuestra vida. Los pre conceptos, creencias, mandatos familiares, expectativas y demás sueños o secretos con los que nos vimos envueltos antes de salir a la vida. Descubrir, sin juicio de valor, la cultura familiar y las características de quienes rodearon a nuestros padres para que nos criaran de la manera que lo hicieron, es sumamente trascendental.
Ayuda principalmente a entender y así poder asentir a todo tal cual como sucedió. Sin echar culpas ni broncas. Simplemente entender desde la mente y el corazón cuál era el entorno en donde crecimos. Este conocimiento también nos sirve para ordenar, desde la intención, cualquier desorden vincular que haya habido.
Bert Hellinger es psicólogo, especialista en constelaciones familiares y creó el concepto de “órdenes del amor”. Se refiere a las reglas que se mantienen en los sistemas familiares a lo largo del tiempo. Cuando no respetamos estas normas, se rompe el orden y el equilibrio del sistema, lo que puede convertirse en origen de conflictos o patologías a nivel psíquico, físico o
de relación.
Los tres tipos de órdenes son:
En la jerarquía: se refiere a que los que llegaron antes tienen prioridad sobre los que llegaron después y así es como han de ser reconocidos. Esto se interrumpe cuando hay hijos cuidando padres, abuelos a cargo de nietos, hermanos a cargo de hermanos.
En la pertenencia: Todos aquellos que en algún momento formaron parte del sistema tienen su sitio. Es así como alguien expulsado, ignorado o no nacido, genera un desequilibrio en el sistema.
En el equilibrio entre el dar y el tomar: los mayores y los que llegaron antes dan y los pequeños y los que llegaron después toman. El desorden se da cuando hay intercambios entre adultos de una manera desigual, dando por demás o esperando excesos a cambio.
Durante la terapia, esto se puede subsanar, poner luz y tomar conciencia. Y así evitar que se sigan repitiendo desordenes en las generaciones futuras. Te ayudo a descubrir estos desordenes y a sanarlos desde el presente.
Saludos
Lic. Florencia Pérez Pandolfo
