Desarrollo Personal

El Camino del Desapego. Por Daniela Pierotti

El Desapego es una Ley Cósmica Principal. Es un Principio Evolutivo Inevitable como toda Ley Natural. Es como una Orden Cósmica y a la vez sucede espontáneamente.

La “CosmoDinamia” se puede traducir desde un fractal menor como “GeoDinamia” y “BioDinamia”. Todo Equilibrio es Móvil, es decir se establece a través de los cambios y movimientos. Llamamos Conciencia a la Fuerza Equilibrante.
Cuando la Galaxia genera su movimiento de giro y expansión principal, es decir cuando se desenvuelve un giro de nuestra Galaxia se producen desprendimientos de materia y energía, que dejan de ser retomados y revehiculizados o absorbidos. Nosotros, las personas, como fractales pequeños y semejantes, pertenecientes a estos Ciclos Galácticos a menor escala, acompañamos estos desprendimientos a nuestros propios ritmos.
La Tierra en su potencial original es un gran Centro de Aprendizaje Universal. El Aprendizaje Principal es la EQUIDAD. La Equidad es una Condición Ecuánime o de Igualdad que purifica los aspectos reductores del Amor Absoluto, y los integra para comprender la Humildad como puerta al Mayor Argumento del Ser Humano que es el Amor Natural.
La forma de aprender en Nuestro Planeta es diversa y múltiple, variable y combinada, también aleatoria. Para la condición de Espacio- Tiempo se aprende en etapas; para el mundo fractal se aprende por capas o dimensiones y, para el mundo sagrado, en espiral ascendente. La sanación integrada es un camino de aprendizaje.
Desde lo vivencial o la experiencia, los Seres Humanos aprendemos por Oposición para llegar a la Inclusión, es decir la Equidad.
Por esto transitamos el Apego hasta aprender el Desapego, o aprendemos el desapego transitando el apego. Las Heridas Primordiales o Iniciales son las que abren la puerta y fijan el Apego en sus diferentes manifestaciones emocionales, como por ejemplo miedo, ansiedad, control, dependencia. Estas heridas son generadas en la relación primaria Madre – Hijo, como hijos, en el hijo. El Ser Hijo fundido en la energía materna debe trascender su propia historia de amor para resolver patrones fijos y erróneos de relacionamiento con otros seres.
La discontinuidad genera la continuidad. La muerte genera la vida. La cadena del amor es eterna como las manos que se toman en una ronda de personas. El Amor es Luz Sensible, se siente, y su manera de expresión también es a través de la sensibilidad. Por lo tanto susceptible a tironeos, forcejeos, arrastres, cortes, empujes. Estas oscilaciones bruscas son las que a lo largo de las experiencias nos llevaran a la misma conclusión, una y otra vez, de que son inútiles. Nos llevarán una y otra vez a rendirnos, soltar y continuar en el buen sentido de estos términos. A liberarnos.
Nuestra Frecuencia o Vibración Original de Encarnación consiste en una Voz única o tono de voz o expresión o manifestación. Por eso es que en nuestra Concepción se dirige o antepone El Verbo que luego da lugar a una traducción de esa vibración que se denomina Patrón de Encarnación. Que no es ni más ni menos que el Estilo Único de Experimentar la Vida Elegida. Si ese Verbo es atravesado por una herida de concepción o encarnación este Patrón de Encarnación puede repetirse en cada circunstancia erróneamente y estancarnos o frenar nuestro aprendizaje verdadero o principal. La Vida está allí esperándonos desde la Concepción.
Su energía se conduce por sí misma y nos invita o nos envuelve en su fluir. Pero al no estar intactos, desde el inicio, fijamos patrones limitantes. Desapegar de estos Patrones de Encarnación es el camino y la meta, transgrediéndonos y trascendiéndonos a nosotros mismos para retomar la frecuencia exclusiva. Apegarse no siempre significa aferrarse a algo, alguien o a alguna situación externa. Sino que también significa estar fijos o ser fijados en un patrón
emocional propio que nos convence de que somos así, o que nos genera seguridad de algún tipo, como una autoestima aparente pero no real.
Los momentos límites nos llevan a desapegar. Son las antesalas mismas de las muertes personales. Son los grandes ordenadores y activadores del principal desafío: disolver la ilusión para encontrar nuestra verdad. Así podemos reconocernos como cocreadores de lo que nos ocurre. Así, por ejemplo, reconocemos que el “desengaño” fue “autoengaño” o que el “desencuentro” fue “autoencuentro”.
Generamos o adquirimos mapas mentales o conceptuales como ideas conectadas que se transforman en argumentos de nuestra vida, inútiles a la hora de recibir la realidad. Todos somos el nexo a la realidad y la integramos a través del respeto por las diferentes miradas. Es decir, sin determinar la realidad. Porque la Equidad genera respeto social.
El Desapego es justamente Respeto… permitir, dejar ir, dejar volver, elegir en desolación como esas partículas de luz desprendidas… somos el desapego mismo…
Este Logro de Integridad, esta Bienvenida a nuestras Despedidas, esta discontinuidad que nos permite continuar, hace que recuperemos a cualquier edad en cualquier circunstancia la MOTIVACIÓN. El desapego es el verdadero umbral que genera CALMA. La calma interna es casi el único indicio de quietud y reparación… la calma es la llegada… a una nueva chispa o impulso.
La quietud genera el nuevo movimiento.
El Pasado vuelve solo, cuando quedó algo que recuperar o aprender o integrar. El Futuro llega solo. El Barrido Cósmico nos muestra el verdadero destino de cada uno y de todos, que es la Etérica Luz.
Desapegar es renovar la visión sobre nosotros mismos. Tomar la oportunidad.
“El Hombre es amoroso.
La Vida es amorosa.
El Ordenamiento de las cosas es Unidad.
Mantente incólume en la dualidad de las cosas,
viendo el Todo en la Nada,
como Nuevo Punto de Observación.
Expandirse es igual a Diluirse”

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