Hablemos de crisis de la mediana edad por Claudia David
Esta etapa de la vida suele ocasionar inseguridades, ansiedad, baja autoestima.
¿Cómo podemos ayudar desde el Counseling en este tipo de crisis?
El término crisis de la mediana edad, expresado por primera vez por Elliot Jaques, médico canadiense en el año 1960, describe las dificultades emocionales por las que pasan algunas personas entre los 45 y…55/60 años.
Esta etapa de la vida suele ocasionar inseguridades, ansiedad, baja autoestima y pueden estar determinadas por distintos factores:
– Alteraciones hormonales
– Crisis profesionales y laborales
– Crisis en la pareja
– Síndrome del nido vacío.
– Muerte de familiares y amigos cercanos
Hoy vivimos en una sociedad que tiene fascinación por la Juventud. Ser y permanecer joven implica tener muchos años por delante para realizar sueños, metas y planificar la vida. Es decir, la juventud tiene TIEMPO. Ese tiempo es valioso porque, justamente, es limitado. Lo importante es entender que todos envejecemos y que cada etapa de la vida posee sus dificultades y también sus beneficios.
Vamos a repasar algunos síntomas de esta llamada crisis de la mediana edad.
Sensación de hastío o falta de placer en realizar actividades que antes eran estimulantes.
Aislamiento social y familiar
Alteraciones del humor
Obsesión por la apariencia
Excesiva nostalgia
Cambios en la libido
Cambios financieros
Depresión
Ahora bien, ¿cómo podemos ayudar desde el Counseling en este tipo de crisis?
Cuando un consultante está pasando por un momento de vida en que la sensación de descontento es frecuente y está descontrolando varias áreas de su vida, es hora de parar y prestar atención a las emociones y comportamientos.
Escucharlos y ayudarlos a reflexionar acerca de cuáles son los mensajes atrás de esas sensaciones, haciendo foco en las emociones.
Juntos, podemos definir prioridades y dejar un tiempo para realizar lo que realmente les gusta.
Esta etapa no es sinónimo de crisis, es una realidad, un hecho esperable y, por lo tanto, podemos ayudar a la persona a elaborar este período.
La meta será, entonces, acompañar este proceso de la mejor forma y lograr que quienes estén atravesando esa etapa de la vida, tomen conciencia del abanico de posibilidades que se abre a partir de este tiempo y la oportunidad de crecimiento, así como recuperar el equilibrio emocional.
Clr. Claudia David